Cofradía de los pescadores
13 marzo, 2021
El olor del mar, las excelentes cantinas y el amarillo inconfundible de las barcazas pintan la viva estampa del tradicional puerto de Rawson.
El puerto de Rawson se encuentra a solo 6 kilómetros de la ciudad, junto a la desembocadura del río Chubut en el océano Atlántico. En su muelle, ubicado en la margen norte del río, amarran los clásicos barcos pintados de color amarillo, miembros de la denominada “flota amarilla”, que se dedican a la pesca de la merluza negra, el camarón y el langostino patagónico.
Por otro lado, una colonia de lobos marinos habita de forma permanente en el puerto; acompaña las embarcaciones de los pescadores en sus viajes siempre a la espera de algún bocado que caiga al agua. Cuando no están persiguiendo una barcaza, los lobos se dedican a tomar sol, participan activamente de las fotografías que toman los turistas y regalan su impronta a las conocidas postales del puerto.
También es posible ver a los pescadores deportivos probando suerte desde el espigón o en la playa Magagna en busca del róbalo o del codiciado mero, apreciado por el sabor de su carne.
Sin embargo, uno de los atractivos más importantes del puerto de Rawson es la posibilidad de probar las paellas o cazuelas de mariscos que se ofrecen en las tradicionales cantinas ubicadas en el lugar. Entre ellas se destaca la Cantina Marcelino, fundada en el año 1971 y todavía en manos de la familia, que ofrece al visitante las exquisiteces y la esmerada atención que la caracterizan. En caso de decidir visitarla, no se debe dejar de probar la picada de mariscos.
Durante el verano, el puerto de Rawson es la sede de la Fiesta Nacional de los Pescadores del Sur, tradicional celebración que atrae miles de turistas, además de los habitantes de la región. En dicha fiesta se realizan diferentes actividades deportivas y culturales, además de la elección de la Reina de los Pescadores, donde bellísimas jovencitas de la zona hacen gala de su encanto.
Durante la celebración también se realiza la procesión náutica con la virgen Stella Maris, patrona del mar en los barcos de pesca, acompañada por las barcazas amarillas, que arrojan flores al mar en memoria de los marinos perdidos.