Cuáles son los mejores recorridos para descubrir y vivir a pleno los colores del otoño en Angostura
14 abril, 2022
Abril es el mes de los rojos, amarillos y marrones en Patagonia y Villa la Angostura, el jardín, es el lugar ideal para vivirlo.
La mayoría de los angosturenses esperan este momento del año como uno de sus preferidos.
En esta nota, te cuento cuales son para mí los dos mejores circuitos y lugares para los colores del otoño. Un recorrido en auto y el otro caminando, los dos impactantes.
¿Por qué los colores de las hojas en otoño?
Siempre ocurre cada vuelta al sol, luego de cada equinoccio de otoño, cuando el frío comienza y los días son cada vez más cortos, muchas de las hojas de plantas se ponen rojas y luego caen.
Pero, ¿porque no solo decir otoño? El tema es que el clima con diferentes estaciones derivado de nuestra rotación y traslación es el principal detonante.
¿Escucharon hablar de “La Clorofila”? Les aclaro, no es un personaje del gran Inodoro Pereyra, sino pigmentos verdes (chloros) esenciales para transformar energía de la luz solar, dióxido de carbono y agua en azúcares que alimentan toda la planta.
El tema es que funciona bien con un clima cálido o templado del verano, pero con noches más largas y bajas temperaturas, la fábrica no es eficiente e incluso se deja de producir clorofila y se va degradando. La planta sabe que debe ahorrar y guardar energía para la próxima primavera.
Volviendo a la clorofila, al degradarse y no ser restituida, la hoja deja de tener color verde y comienzan a resaltar los colores de otros pigmentos que siempre están, pero son tapados por el intenso verde. A su vez, la planta va “cerrando” las cañerías del tronco a las hojas para pasar el invierno casi sin actividad y también se produce un efecto que acentúa los pigmentos rojos.
Este tapón en la base de las hojas termina por generar un corte a través del cual la hoja termina cayendo.
Perennes
Hay plantas en las montañas de Patagonia que no pierden las hojas y se mantienen verdes, como el coihue, radal o helechos. Sin embargo, igualmente bajan marcadamente su producción y tienen que gastar mucha energía en mantener en invierno, hasta han desarrollado sustancias anticongelantes para que no se generen cristales de hielo dentro de las hojas. Dos estrategias distintas, aunque normalmente las que pierden las hojas, toleran climas más duros (ej. ñires y lengas).
Los paisajes de otoño mas lindos
Ahora sí, dejando de lado la biología, les cuento cuales son mis paisajes de otoño preferidos en los alrededores de Villa la Angostura (muy resumido a uno de trekking y otro un paseo en auto):
Trekking al Cajón Negro – Paisaje de Lengas
Es un espectáculo maravilloso los bosques de Lenga con sus tonalidades rojas a marrones, en el Parque Nahuel Huapi, a partir de los 1.000 metros de altura hasta que desaparecen por clima hostil a los 1.600 metros.
Es impactante en cualquier cerro que subamos, aunque destaco el trekking al Cajón Negro y la conexión con el Filo Belvedere. Van a caminar mucho tiempo dentro del bosque ya que es un gran valle. Aclaro que no se pone rojo parejo todo el valle, primero las Lengas achaparradas de la alta montaña y luego las del bosque del valle, que está más abajo. La experiencia es distinta, pero lo que más impacta es estar “bajo el bosque” alto.
Paso Córdoba – el grand tour de los colores impactantes
Esta muy linda vuelta de todo el día en auto, en otoño se transforma en espectacular.
Son unos 255 km (con unos 60 km de tierra) que valen la pena. Recomiendo partir desde Villa la Angostura hacia el norte, donde combinarán gran parte de Siete Lagos, Meliquina, el Paso Córdoba y Valle Encantado para regresar a Villa la Angostura por el sur.
Con mate y facturas, salgan temprano de Villa la Angostura hacia la ruta de Siete Lagos. A medida que la van recorriendo en cada curva sorprenden la mezcla de verdes intensos y los rojos y amarillos, aunque donde estalla es en los ñirantales (bosque de Ñires) de los valles durante kilometros, en la zona de la cascada.En el Río Hermoso (puesto de gendarmería) deben salir de la ruta Siete Lagos y tomar la ruta provincial 63 de tierra, camino a Meliquina. Lo recorren hasta llegar al pueblito y continúan hasta el río Caleufu (parada obligada para ver los pozones y la cueva arqueológica de Casa de Piedra).
A partir de este punto, la ruta de tierra comienza a subir y a mostrar una mezcla de estepa y matorrales de ñire con una combinación de colores otoñales increíbles hasta su punto más espectacular en el “paso”, el punto más alto. A los colores de los ñirantales y lengales, se suman formaciones de roca impresionantes con formas de castillos y torres.
Luego del espectáculo, comienza el descenso entre bosques de Lenga y estepa y se van adentrando a otro impactante paisaje, el de Valle Encantado, ya de por sí muy extraño y en otoño resalta alucinante los álamos y sauces que van recorriendo las costas del Río Limay. Les recomiendo, parar el auto y bajar en alguno de los accesos a la costa del río para maravillarse y recargar energías.
La vuelta a Villa la Angostura retoman la ruta 40 que la toman en el desvío antes de llegar al puente del Limay. Que, aunque la han recorrido muchas veces, no deja de ser hermosa y los invito a que la vivan con ojos de paseo
Fuente: Diario Andino