Cueva de las Manos: un Patrimonio Cultural de la Humanidad
11 marzo, 2021
Rodeado en cientos de kilómetros sólo por el constante rumor del viento patagónico, se abre el Cañadón del río Pinturas. Allí, entre los pliegues de sus altos paredones, se descubre el arte rupestre de la Cueva de las Manos, donde pobladores de 9.000 años atrás sellaron su arte y su testimonio de vida.
Su fama no es por nada. Esas manos, guanacos y figuras geométricas estampados en la piedra de la cueva constituyen la más antigua expresión de los pueblos sudamericanos que se tenga conocimiento. Así lo entendió la Unesco, cuando en 1999 lo nombró Patrimonio Cultural de la Humanidad.
Su ubicación, solitaria, en medio del noroeste de la estepa santacruceña, le permite conservarse casi intacta. El pueblo más cercano, Perito Moreno, está a 163 kilómetros de allí. Y mas allá, ya cerca de la cordilera, se encuentra Los Antiguos, que era el lugar de descanso de los ancianos de las desaparecidas tribus indígenas.